20 octubre 2007

Disquito para el fin de semana (Jana Hunter)



Algo tranquilo, reflexivo, que fluye, desde las raíces en rizoma de la tierra salen al exterior contándonos historias, las eternas, más humanas, nuestros conflictos y esperanzas, pero inventando sobre el formato folk, de guitarras con cuerdas metálicas de los antiguos, pero también con intervenciones eléctricas, con ambientes que combinan el canto solitario y el comunitario. Algo de psicodelia, reminiscencias a la marca generacional de fines de los sesenta del movimiento civil en Estados Unidos, pero desde el ahora, ya habiendo atravesado el siglo XX y sacando la palabra desde el XXI, que a todas luces se nos viene muy duro, pero hay que seguir, insistir desde nuestra herencia abierta al futuro.

La voz de Jana Hunter llega así desde lejos pero también desde muy cerca. A través de sus temas oigo a veces al John Lennon acústico, ya con Yoko, cantando comprometido, pero con esa distancia irónica del working class hero, que asume una estética sofisticada, pero es capaz de abandonarla sin problemas para cantar simple con su guitarra de palo a nosotros, que nos llaman a veces sociedad civil o movimientos sociales, que estamos ahí antentos, prestos a dejarnos convocar, para firmar y apoyar a una buena causa, quizá incluso ir a alguna movilización, y hasta organizarnos, donando nuestro tiempo, energías al colectivo.

Escucho a Jana Hunter y oigo también la furia contenida de Neil Young, el siempre joven buffalo springfield canadiense, que es capaz de conectarse desde la convicción de quienes buscamos incansables nuestro destino, con Perl Jam o Kurt Cobain, sin dificultad alguna, porque el rock will never die, el rock jamás morirá. Sabemos, él nos enseñó que Rust Never Sleeps, el oxido nunca duerme, y depende de nosotros si nos dejamos carcomer a diario por la fatiga rutinaria, o nos abrimos al azul del cielo, al verde de los bosques y la selva, a la corteza de una araucaria, a la piel de la que duerme a nuestro lado.

Oigo a jana Hunter y, a veces, como un pájaro fugaz en vuelo -como las sombras de las gaviotas que cual latigazos sobre la tierra observaba Julio Cortázar pasar-, o como un venado en huida, recuerdo a la Janis en sus momentos tranquilos, previos al grito, cuando se concentraba en el canto limpio, sin exageración, en un punto al que también alguna vez llegó Sinead O'Connor, o cuando cantaba desde el enojo de género la Tracy Chapman, con su guitarra clara como la de Joni Mitchell.

Pero en este disco, que salió a la luz en febrero de este 2007 esquivo, hay además, nuevas presencias. Desde la izquierda del under, la música independiente, Jana Hunter, junto a su hermano y amigos, grabaron este trabajo en una casa en Texas. Y en la calma que da el saberse de un lugar, aunque se esté en la búsqueda, en la pausa da cantar desde la orilla de la carretera, haciendo dedo porque la vida está en otra parte, por There's No Home, no hay hogar que nos ate, porque ahí ya no hay casa, el productor del disco, Devandra Benhart, desde su sello independiente, Gnomorecords, atraviesa el conjunto de esta pequeña obra, con su estilo sencillo como la palabra pan, puro como el Victor del cigarrito y Luchín.

Buen disco. Con trece temas breves. Pasa, uno goza cada uno de ellos en su corta singularidad, y concluye abierto, como la vida misma, no?

Puedes oir parte de su trabajo anterior en http://www.myspace.com/janahunter

19 octubre 2007

Nacionalismo futbolero


No obstante no soy un as para la pelota, disfruto mucho jugar una pichanga. También las veces que puedo me gusta sentarme, ojalá junto a mis hijas porque se ríen mucho de mis gritos, a ver algún partido por televisión. Más me gusta ir con mi amigo Camello y su hijo a la estadio a hinchar por el Colo, gane o pierda. Y tengo la camiseta del albo que me pongo los fines de semana, y también la de Boca, el equipo del mágico Maradona. Y sobre todo disfruto las transmisiones en vivo de cualquier partido de fútbol en Al Aire Vivo en Cooperativa. Comparto el sentimiento por esta actividad que Borges nunca aprobó, y me gusta vibrar junto a miles desconocidos unidos, abrazados cuando el equipo de uno marca un gol...

Pero nunca, nunca se me pasaría por la cabeza golpear, siquiera insultar a otro por no pertenecer al equipo de uno. ¿Qué tiene que ver eso con el deporte? Sin duda han de haber causas sociológicas para explicar este fenómeno, como exclusión social, marginalidad, falta de espacios para el desarrollo de habilidades afectivas, en fin, un triste largo etcétera real en nuestras sociedades que respiran capitalismo salvaje por cada poro. Sin embargo, frente a noticias como la siguiente no cabe sino indignarse, pues no debe haber nada más absurdo y patético que la xenofobia por motivos tan básicos como un partido de fútbol...

"En el día jueves 17 de octubre, con ocasión del Partido de Futbol entre las Selecciones de Chile y Peru, un grupo de unos diez jóvenes escolares a las 16.00 hrs irrumpieron al lado de la Catedral con insultos, agresiones y hostigamientos hacia las organizaciones y peruanos reunidos en el lugar, entre otros insultos que no repetimos por respeto a ustedes la siguiente frase:

“Peruanos muertos de hambre nosotros les damos que tragar"

El grupo acorraló a los dirigentes peruanos en el lugar, por lo que debieron salir corriendo sin que la policía adoptara ninguna medida de protección.

Cabe recordar el caso de Enrique Pajuelo, joven peruano que quedó paralítico de por vida a causa de golpes que le propinaron hinchas chilenos después de un Partido de Futbol entre Chile y Peru.

Enrique hoy está postrado sin poder moverse de por vida a causa de la

En Chile muere un migrante cada 19 días ..

Enviaremos una alerta sobre el tema, hemos entregado la solidaridad a los dirigentes peruanos afectados y solicitaremos explicaciones a las autoridades sobre el punto,

Con estupefacción,
Dirección Ejecutiva
Observatorio Control Interamericano de los Derechos de los Migrantes
OCIM

www.migrante.info
www.observatoriomigrantes.org

18 octubre 2007

40 años del Latino


El muchachito a la derecha soy yo. Acabo de descubrir esta foto en el Baúl de los Recuerdos del Colegio Latinoamericano de Integración, y quedé por momentos como ante un abismo, conteniendo la respiración, feliz y triste a la vez, conmocionado. Como nos canta Pablito Milanés como solo él sabe hacerlo:

"Dónde estarán los amigos de ayer
la novia fiel que siempre dije amar.
Dónde andarán mi casa y su lugar
mi carro de jugar, mi calle de correr.
Dónde andarán la prima que me amó
el rincón que escondió, mis secretos de ayer.

Cuánto gané, cuánto perdí,
cuánto de niño pedí,
cuánto de grande logré
qué es lo que me ha hecho feliz
qué cosa me ha de doler.

Si era vivir la infancia
con el ansia de todo saber
pues el saberlo todo y con nostalgia
ver lo que se fue.

Dónde estarán, a un lado de mi piel
los guardo bien y a veces brotarán
y endulzaran un brusco acontecer
llenándome de miel que muchos libarán.
Me lanzarán al viento
y a mi tiempo me retornarán
vendré feliz y fresco
para siempre sé donde estarán."

Qué cierto, porque el tiempo, el implacable, el que pasó ahora nos ha conducido a que el colegio que nos albergó cuando enanos esté por cumplir 40 años... Tantos recuerdos, amores furtivos, temores, ímpetus, porfías, gratuidades vivimos en las salas del Latino, en los recreos, en las reuniones armando centros de alumnos, en los paseos, en los inicios a la vida militante, en las discusiones con los profes, en el intercambiar miradas con las compañeras... Qué tiempos tan atrasevados por sentimientos, historia, descubrimientos. Tanta energía, ganas, vida, mucha vida. Música, física, artes, primeras lecturas políticas, primeros poemas y canciones propias, excitaciones, cuerpo, mucho cuerpo.

Qué lindos recuerdos y qué tristes a la vez! La nostalagia por lo ido, las ganas de revivir, de volver, de quedarse por siempre en ese tiempo eterno...

17 octubre 2007

Tiempo para y con amigos


El martes 16 de octubre celebramos el Día del Maestro, en el Museo de la Educación Gabriela Mistral, ocasión en que el Museo recibió la placa que tenía la Asociación Gremial de Educadores de Chile (AGECH), del período de la dictadura, en su sede en Lord Cochrane 184. Próximamente se creará una sala en este museo, que estará dedicada a cuidar el patrimonio y cultivar la memoria de las luchas del magisterio en el período de la dictadura, para que lo conozcan las nuevas generaciones. En forma muy cariñosa, los profesores hicieron recuerdos sobre el aporte de mi padre a tales luchas, en su calidad de dirigente de la AGECH.


Una vez la placa fue entregada al Museo, los dirigentes históricos de la AGECH, que aparecen tras la placa (Jorge Pavez, Alejandro Traverso, Guillermo Scherping, entre otros), nos reunimos con los profes que formaron parte de este movimiento gremial. Con muchos de ellos compartí de niño cuando acompañaba a mi viejo a sus reuniones en la Agech y en los actos y marchas.


Aquí aparece mi amigote Nelson Arriagada, bajista del Mario Feito Trío, que tuve la oportunidad de reencontrar a propósito del lanzamiento a principios de octubre de su album El último Patagón, en un estilo que llamaría de "jazz-docto", pues fusionan a mi gusto la sensibilidad de la música clásica con el jazz post-bebop. Excelente música la de estos compatriotas, que disfrutamos en el club de jazz El Perseguidor.


Hace pocos días se hizo, además, el lanzamiento del libro Con los ojos del sesenta, Las Crónicas del Bello Sino, en la Salta Master de la Radio Universidad de Chile. Amablemente su autor, el profesor de la Facultad de Ingeniería, Sergio Jara, quien en sus programas semanales en la radio lleva el nombre de Argos Jeria, me invitó para comentarlo. La sorpresa fue que el lanzamiento se transmitió en vivo por la Radio, en el horario habitual del programa.



En el lanzamiento compartimos panel con (de izquierda a derecha), el autor de las Crónicas del Bello Sino, Sergio Jara; el artista visual, director del Museo de Arte Contemporáneo, y actual Vicerrector de Extensión de la Universidad de Chile, Francisco Brugnoli, y el Director de la Radio Universidad de Chile, el Premio Nacional de Peridismo, y mítico director de la Revista Análisis, Juan Pablo Cárdenas. El lanzamiento fue una especie de conversatorio, muy agradable, con público en la sala y transmitido en directo. Cada uno expusimos unos quince minutos, en una atmósfera de respeto intelectual mutuo, y cariño, mucho cariño.


Uno de los asistentes al lanzamiento fue un admirado, querido amigo y compañero, don Luis Corvalán. Fue muy especial encontrarlo con nosotros, por su avanzada edad -unos noventa y cinco años-, por su lucidez y sencillez a toda prueba, y porque se me vinieron a la memoria el recuerdo de cuando tenía unos seis años de edad, y me tocó recibirlo como pionero de pañoleta azul, en Budapest, Hungría, cuando don Lucho fue liberado de prisión en Chile. En tal oportunidad yo estaba muy nervioso; solo tenía que entregarle una clavel en señal de bienvenida y alegría por tenerlo vivo. Me acerqué casi al borde del llanto, y el me acogió con la humildad que le caracteriza, me dió la mano con mucho respeto, y luego me abrazó como si fuera su nieto. Eso fue hace 30 años, y ahora nos reencontramos esta vez él desde la audiencia y yo con la difícil misión de decir cosas coherentes, reflexivas, afectivas. Ahí estaba don Lucho, muy atento, sentado frente a mí en primera fila, con su manta sobre las piernas, su sombrero de hombre de los años cuarenta. Al final del lanzamiento nos dimos un abrazo, me felicitó por mi intervención -uf, me salvé de nuevo!-, e hicimos recuerdos sobre mi abuelo Manuel y mi papá, a quienes conoció muy de cerca.

Todos ellos son algunos de mis amigos. Es tan poco el tiempo para compartir, por lo que simplemente hay que tomar la decisión de restarle tiempo a otras cosas, porque el día tiene solo 24 horas. Pero qué puede ser más valioso que darle el tiempo a los amigos, gastarlo en su compañía?

14 octubre 2007

Musica de la infancia


Navegando me topé con un excelente blog que mantiene Rodrigo Olavarría. "Dicap y más", dedicado a la música vinculada a la Nueva Canción Chilena, como Angel Parra, Victor jara, Patricio Manns, Aparcoa, Los Curacas, Quelentaro, los primeros singles de Congreso, y muchos cantantes y agrupaciones más que difundían su arte a través de una industria discográfica nacional, como los sellos Dicap, Peña de Los Parra, Jota Jota. También hay discos posteriores, del período del exilio de Héctor Pavez, Rolando Alarcón y otros, llegando incluso a los ochentas, con los cassetes de Payo Grondona.

Si uno tragina se topa con los discos que eran la música de fondo de la infancia de quienes nacimos el setenta. Crecimos de la mano de estos discos, como el de Tito Fernández, editado por el sello Dicap, que estando en el exilio en Hungría, ponía cuando chico una y otra vez para escuchar el fascinante partido de fútbol entre animales, que termina Cero a Cero.

Felicitaciones por el blog, vale la pena visitarlo, y por cierto, bajar y disfrutar aquellos disquitos!
http://sellodicap.blogspot.com/

CERO A CERO.
Letra y Música: Coco Díaz.
Allá por el horizonte, en un estadio cerrado,
juegan los seleccionados de la sierra y de los montes,
de un lao el rinoceronte, un mono y un avestruz,
un perro, un pato, un ñandú, y los cinco delanteros,
un lagarto, un burro, un tero, un caballo y un tatú.
Del otro bando la urraca, un elefante y un ciervo,
de halves un gato, un cuervo, y de centro half la vaca,
las cinco piezas que atacan, un gallo y una pantera,
una tortuga aguatera, y un loro que es una flecha,
y allá en la punta derecha, han puesto una chancha overa.

Recitado
Comienza el partido de esta tarde,
Toma la pelota el gallo, que es un huevo de avestruz,
éste la pasa al ñandú, pero intercepta el caballo.
con la rapidez del rayo este la tira a un costao
como está bien colocao está gritando el lagarto
¡Hagan campo que los parto! pero tira desviao
Ahí toma el huevo la chancha que tira bajo y rasante,
pero atento el elefante saca al centro de la cancha,
se produce una avalancha, todo el mundo se alborota
la culpa es de la gaviota que gritó del tabú,
¡que lo saquen al tatú!, claro, si no agarra una pelota.
Viene el centro alto y ceñido, toma de voleo el perro
pero tiene miedo al fierro y se pasa a los ladridos;
el juego está suspendido, está que explota la hinchada,
el burro, flor de patada, le dio en la panza al caballo,
quiso cacarear el gallo, pero el juez no cobró nada.
Cuando arremetía el pato, detiene la carga el loro,
p'a cobrarle faul al toro en la persona del gato,
suena de nuevo el silbato, viene el huevo de avestruz,
salta el perro y el ñandú, y el mono, con una piola,
lo tiene atao de la cola por si entra en juego el tatú.
Se arma el lío al poco rato entre el caballo y la chancha,
porque ésta de atrás lo engancha, y éste le grita ¡Animal!
El mono gritó ¡penal! y el juez lo echó de la cancha.
Se ha entrompao el elefante, y se ha vuelto pura arruga,
por culpa de la tortuga que no va para adelante,
hay una chajá vigilante, que nervioso se pasea,
después se armó otra pelea porque un grillo en el vestuario
dijo que no es partidario de tácticas europeas.

Recitado
Ya se juegan los descuentos, el escore cero a cero,
toma el huevo el tero tero que arremete como viento,
en ese mismo momento se produce un caso extraño,
la urraca sufre un engaño, el perro se ha puesto malo,
la culpa es del pica palos que le comió el travesaño.
Está gritando la chancha, desde el extremo derecho,
que si no le dan afrecho, se retira de la cancha,
vuelve otra vez la avalancha, entra un león enfurecido,
queda el Estadio vacío, cada bicho p'a su agujero,
el escore, cero a cero y así termina el partido.